Selfies significado psicologico
Significado del fenómeno selfie
Los teléfonos inteligentes y las redes sociales han dado lugar a la era del selfie, que fue la Palabra del Año de Oxford 2013. Antes, los selfies no existían. Entonces, ¿por qué nos hemos obsesionado tanto con los selfies y es bueno para nosotros?
Es difícil generalizar la investigación sobre este tema, por lo que este post entra más en los detalles de los resultados de los estudios individuales de lo que normalmente hago con los posts de esta serie. Si quieres saber más, pasa a la última sección.
Los selfies pueden servir para diferentes propósitos. Uno de los principales es la autopresentación: es una forma de presentarnos de manera selectiva ante los demás para representar quiénes somos o quiénes nos gustaría ser. También son una herramienta de gestión de la impresión, para intentar controlar cómo nos ven los demás. Además, los comentarios que recibimos de nuestros compañeros después de publicar selfies en las redes sociales pueden servir para reforzar nuestro autoconcepto.
Las mujeres tienden a publicar más selfies y a editarlos más que los hombres. En un estudio de adolescentes estadounidenses, las mujeres tenían un mayor nivel de inversión en la apariencia de los selfies (como refleja el esfuerzo dedicado a seleccionar y editar selfies y a preocuparse por la apariencia) y de preocupación por los comentarios de los compañeros en comparación con los hombres (Nesi et al., 2021).
Objetivo de los selfies
Un nuevo estudio de la Universidad de Múnich revela que el 77% de la gente se hace selfies con regularidad. Cualquiera diría que el selfie ha perdido su toque cool en cuanto los políticos, o los padres, han empezado a tomárselos. David Cameron intentó esta tendencia millennial hace un par de años, tomándose uno con Obama en el funeral de Nelson Mandela. Sin embargo, el arte de capturar la propia cara antes de enviarla a una red social aún no ha perdido popularidad. ¿Qué tiene este fenómeno que nos empuja a seguir haciéndolas?
Desde luego, no es verlas. La investigación demostró que la mayoría de la gente no disfruta mirándolas. El 82% de los encuestados dijo que prefería ver fotos normales que selfies. Así pues, el arte de hacerlas y mostrarlas es el núcleo de su atractivo.
Y es que hacerse selfies te hace feliz. En un estudio en el que se pidió a diferentes grupos que hicieran una foto de algo que les hiciera felices, de algo que hiciera feliz a otra persona o simplemente que se hicieran un selfie, el grupo de los que se hacían selfies fue el que se sintió más "confiado y cómodo" con el tiempo. Esto demuestra por qué los selfies se han extendido tan rápidamente. Ahora la gente no pasa por delante de un monumento famoso, ve a un amigo o se toma un café sin querer hacerse un selfie. Es un acto que aumenta nuestro disfrute del mundo que nos rodea y nos permite compartir nuestra vida con aquellos con los que nos relacionamos en las redes sociales.
Cómo ves tu artículo selfie
Antecedentes. Las razones y consecuencias de la actividad de las personas en las redes sociales no han sido suficientemente estudiadas. La mayoría de los estudios se han centrado en identificar los peligros y riesgos asociados a la publicación de autorretratos en las redes sociales, pero es una cuestión abierta si este comportamiento sirve para aumentar el bienestar psicológico de las personas.
Diseño. En nuestro estudio participaron 96 encuestados de Moscú, principalmente estudiantes de psicología, que proporcionaron información sobre su actividad en las redes sociales y completaron cuestionarios sobre su motivación, apoyo social y bienestar psicológico.
Resultados. Se identificaron tres motivos principales para publicar selfies: 1) aumentar la autoestima; 2) mantener contactos sociales; y 3) conservar e intercambiar información. Cuanto mayor era la proporción de selfies tomados para preservar información, mayor era el bienestar psicológico del usuario. Encontramos diferencias significativas entre las características de los participantes con alta y baja actividad, y mayor y menor número de "amigos" en las redes sociales. En el caso de las personas con una actividad elevada, su sensación de bienestar psicológico venía determinada en gran medida por la interacción con los demás. Para estas personas, la comunicación (incluso con contactos virtuales) era el recurso importante de bienestar. El otro grupo dependía menos de los demás, y para ellos el bienestar psicológico no estaba relacionado con su actividad en las redes sociales.
Artículo selfie
De hecho, el debate actual sobre el valor y las consecuencias de los selfies es muy diverso. Mientras que algunos destacan el valor de los selfies como un nuevo material para el trabajo creativo y las mayores posibilidades de transmitir emociones, otros están preocupados principalmente por la excesiva autopresentación que promueven los selfies, y señalan los conflictos relacionados, las amenazas a la autoestima o la disminución de la atención plena. Rettberg (2014), por ejemplo, analiza los selfies desde una perspectiva cultural. Describe cómo la cultura selfie da lugar a la experimentación y la inspiración mutua, inventando nuevos géneros como los selfies en serie o los selfies time-lapse. Por ejemplo, el premiado vídeo time-lapse Me, de Ahree Lee, muestra selfies tomados cada día durante 3 años.
En conjunto, los selfies aparecen como un fenómeno un tanto misterioso. Aparte de los proyectos artísticos y de diseño, las consecuencias de los selfies parecen más bien negativas: romper las normas sociales, centrarse en fotografiarse a uno mismo en vez de en lo que ocurre a nuestro alrededor, causar conflictos en las relaciones, fomentar la insatisfacción corporal, la falta de autenticidad y el comportamiento narcisista. Aun así, los selfies son extremadamente populares. Parecen ser para la gente algo más que una nueva forma de hacerse fotos que está de moda. Probablemente, los selfies no se habrían hecho tan populares si no aportaran un valor específico más allá de las fotos "habituales". El presente artículo ilumina esta situación paradójica a través de una perspectiva psicológica y una visión más profunda de las motivaciones que hay detrás de los selfies. Nuestra investigación explora cómo las personas pueden beneficiarse de los selfies, cómo reflexionan sobre ellos y ven su propia posición dentro de la cultura selfie, y por qué los selfies podrían ser más frecuentes de lo que sugieren las declaraciones individuales.