Perfil psicologico de un asesino
Elaboración de perfiles delictivos
Este año se cumplen 30 años de la ejecución del famoso asesino, pero la fascinación de Estados Unidos por Bundy sigue viva. Recientemente, Netflix lo ha vuelto a poner de actualidad en una nueva película, "Extremely Wicked, Shockingly Evil, and Vile", protagonizada por Zac Efron.
La capacidad de Bundy para llevar una doble vida sigue siendo desconcertante. ¿Cómo pudo ir a la universidad, hacer carrera política y mantener una relación duradera mientras agredía y asesinaba al menos a 30 mujeres entre 1973 y 1978?
"Desde hace mucho tiempo existe una fascinación por los psicópatas. Muchos de los personajes de ficción más populares ejemplifican la psicopatía", afirmó. "Estas personas a menudo ejemplifican el verdadero mal y uno se siente atraído a verlo, como uno se detiene a observar un accidente de tráfico o disfruta viendo una película violenta o de terror".
"Mi investigación sobre Ted Bundy se centra más en demostrar las ventajas de un modelo de rasgos dimensionales (el modelo de los cinco factores en particular) para identificar y describir a las personas con trastornos de la personalidad", explicó. "Ted Bundy es un buen ejemplo de ello en el sentido de que las descripciones categóricas de Ted no proporcionan del todo un retrato exacto o individualizado. No tiene algunas de las características del psicópata prototípico".
¿Cuál es la psicología de un asesino?
El rasgo psicológico más común entre los asesinos en serie parece ser un comportamiento antisocial extremo: carecen de empatía, parecen incapaces de sentir remordimientos, tienen poco respeto por las leyes o las normas sociales y sienten un fuerte deseo de vengarse de las personas o de la sociedad en general cometiendo actos violentos.
¿Cuáles son las teorías psicológicas de los asesinos en serie?
La teoría general de la tensión, la teoría del aprendizaje social, la teoría de la actividad rutinaria y la teoría del control social/vínculo ayudan a explicar los motivos y métodos de los asesinos en serie.
¿Los asesinos en serie son psicológicamente diferentes?
Los asesinos en serie se caracterizan por carecer de empatía hacia los demás, junto con una aparente ausencia de culpa por sus actos. Al mismo tiempo, muchos pueden ser superficialmente encantadores, lo que les permite atraer a víctimas potenciales a su red de destrucción.
Cómo trazar el perfil de un asesino en serie
La elaboración de perfiles de delincuentes, también conocida como elaboración de perfiles criminales, es una estrategia de investigación utilizada por las fuerzas de seguridad para identificar a sospechosos probables y ha sido empleada por los investigadores para relacionar casos que pueden haber sido cometidos por el mismo autor[2]. Múltiples delitos pueden vincularse a un delincuente concreto y el perfil puede utilizarse para predecir las futuras acciones del delincuente identificado. En la década de 1980, la mayoría de los investigadores creían que la elaboración de perfiles de delincuentes solo era relevante para los delitos sexuales, como las violaciones en serie o los homicidios sexuales, pero desde finales de la década de 1990 se han publicado investigaciones que respaldan su aplicación a los incendios provocados (1998) y, posteriormente, al terrorismo (2000) y a los robos con allanamiento de morada (2017)[3][verificación fallida].
La elaboración de perfiles psicológicos se describe como un método de identificación de sospechosos que trata de identificar las características mentales, emocionales y de personalidad de una persona basándose en cosas hechas o dejadas en la escena del crimen[4].
Hay dos supuestos principales en la elaboración de perfiles de delincuentes: la coherencia conductual y la homología. La consistencia conductual es la idea de que los delitos de un delincuente tenderán a ser similares entre sí. La homología es la idea de que delitos similares son cometidos por delincuentes similares[5][6][7].
Asesinos en serie
La escena del crimen ofrece a menudo una comprensión empírica de un crimen: desde el arma hasta la hora y el lugar, pero ¿y si un crimen también puede resolverse estudiando la psicología del asesino? ¿Qué lugar debemos dar a la mente del criminal en una investigación?
Robert Ressler, el padre de la elaboración de perfiles, intentó responder a estas preguntas cuando empezó a seguir su deseo de combinar la psicología y los casos criminales. Creó lo que se denomina "perfil criminal", y que también puede describirse como "un esbozo biográfico de patrones de comportamiento" (Vorpagel 1982). No fue un camino fácil el que recorrió, debido a cómo se percibía la psicología en las operaciones criminales, que se centraban más bien en las pruebas y los análisis forenses (pruebas y técnicas científicas utilizadas en relación con la detección de delitos). Gracias a William Webster, jefe del FBI, Ressler se convirtió en Agente Especial Supervisor de la Unidad de Ciencias del Comportamiento de Quantico. A finales de la década de 1970, junto con John Douglas, comenzó a realizar una serie de entrevistas con algunos de los peores asesinos en serie de Estados Unidos : 36 en total. El objetivo principal de estas entrevistas era recopilar información sobre la vida de los asesinos y ver las repercusiones en su actividad criminal. La elaboración de perfiles criminales resulta útil cuando faltan los motivos de un asesinato normal: el uso de la psicología ayuda a descubrir los rasgos peculiares o las patologías del asesino. Aunque no todos los criminales pueden encajar perfectamente en un caso, algunos presentan patrones similares que pueden llevar a reducir el grupo de posibles sospechosos. No obstante, Ronald Holmes y Stephen Holmes, en Profiling violent crimes : an investigative tool, subrayan cómo la elaboración de perfiles criminales "sigue siendo una herramienta y por sí sola nunca ha resuelto un caso de asesinato".
Perfil psicologico de un asesino en línea
Mapear las mentes de los asesinos no es tarea fácil. Robert Ressler fue el hombre que desarrolló los perfiles psicológicos en la Unidad de Ciencias del Comportamiento del FBI en Quantico, Virginia. Junto con su colega John Douglas, participó en algunos de los casos de asesinos en serie más importantes de la historia de Estados Unidos, como los de John Wayne Gacy, Ted Bundy y Jeffrey Dahmer.
Robert Ressler empezó a sentir fascinación por el asesinato y por cómo un individuo puede acabar con la vida de otro a una edad temprana. Era un niño de 9 años de Chicago, Illinois, cuando en 1946 se produjo el caso del "Asesino del pintalabios", en el que dos mujeres y una niña fueron secuestradas y asesinadas en la ciudad. El joven Ressler y sus amigos crearon su propio grupo de detectives para atrapar al culpable. El caso fue bautizado como el del "pintalabios" debido a un mensaje garabateado en una de las escenas del crimen. El asesino parecía pedir ayuda para detener por la fuerza su ola de asesinatos, ya que era incapaz de detenerse a sí mismo.
William Heirens fue detenido a los 17 años y confesó todos los crímenes, aunque hoy existen serias dudas sobre la validez de sus confesiones. Para Ressler, este caso desencadenó su intriga de por vida por las mentes de los asesinos en serie y las oportunidades que ofrecía la elaboración de perfiles psicológicos.
